En las calles de La Habana y otras ciudades cubanas, un nuevo ritmo ha tomado el protagonismo, desafiando los sonidos tradicionales que definieron por décadas la música de la isla. No se trata de son, salsa o chachachá, sino del reparto, una versión cubana del reguetón que ha revolucionado la escena musical y, sobre todo, la forma de bailar en la isla.
El reparto se ha convertido en la banda sonora de la juventud cubana. Con un estilo que mezcla los beats urbanos del reguetón con letras callejeras y cotidianas, esta variante local ha logrado abrirse camino en un panorama musical históricamente dominado por los géneros tradicionales. Aunque a algunos puristas de la música cubana les ha costado aceptar esta transformación, el reparto ha demostrado ser una fuerza imparable, ganando popularidad en barrios, discotecas y fiestas callejeras.
Este nuevo ritmo se caracteriza por un sonido más crudo y acelerado que el reguetón tradicional, con letras que reflejan las vivencias y el lenguaje popular de los jóvenes cubanos. Las canciones de reparto no solo están llenas de picardía y humor, sino que también abordan temas sociales y cotidianos, conectando directamente con la realidad de quienes las bailan.
Uno de los pioneros del género es Chocolate MC, conocido como “El Rey del Reparto”, quien junto a otros artistas como El Kamel y Yomil y El Dany, ha impulsado el crecimiento de este movimiento, tanto dentro como fuera de Cuba. Sus canciones son himnos en las fiestas y eventos juveniles, donde el baile se vuelve una expresión frenética y libre, muy diferente al compás cadencioso de los ritmos tradicionales.
“El reparto es lo que hoy nos identifica, lo que nos hace movernos y expresarnos”, comenta María, una joven de 20 años que asiste regularmente a las fiestas de reparto en La Habana. “Es nuestra forma de sentir la calle y de divertirnos, ya no es solo la salsa lo que nos representa”.
A pesar de que el reparto sigue generando debate entre los más conservadores, su impacto es innegable. Cada día más artistas emergentes apuestan por este género, mezclando los sonidos urbanos con influencias locales, lo que asegura que el reparto continúe evolucionando y ganando terreno en la escena musical cubana y más allá.
Mientras tanto, el baile ha cambiado: los cubanos ahora se mueven al ritmo del reparto, mostrando que la música de la isla sigue siendo tan innovadora y diversa como siempre, adaptándose a los nuevos tiempos sin perder su esencia.
Fuente: Agencia EFE
